Alquileres vacacionales en Yarrangobilly

“Excelente comunicación, respuestas rápidas, flexible con check-in y amigable por todas partes. Excelentes anfitriones! El apartamento en sí era de buen tamaño para 4 adultos y un niño de 3 años. Fue genial tener 3 (!) Inodoros separados, pero las habitaciones eran un poco pequeñas (aunque no realmente un gran problema, ya que en realidad solo las usamos para dormir de todos modos: P). La piscina está justo afuera, que era agradable, y la zona de la sala de estar y la cocina es un espacio abierto generoso, que es ideal para familias cuelga. La ubicación del piso también es excelente, siempre que tengas un automóvil (que es como funciona Canberra). 15-20 minutos a la ciudad, comida, tiendas ... fácil campesino. Tuvimos una gran estancia, nos sentimos muy bien atendidos, y definitivamente recomendaría el lugar de Lui si estás planeando una visita a Canberra :)”

“Tuvimos una estancia de fin de semana largo verdaderamente encantadora en el lugar de Bell, en las afueras de la ciudad. Las colinas, los cielos estrellados y la tranquilidad son un bálsamo para el alma. Y si eso no completa el trabajo, siempre existe la silla de masaje especial que puede aliviar algo de la tensión profunda en los músculos de la espalda. Nos encantó nuestra habitación enorme y la cama muy cómoda. Si alguna vez nevó durante el invierno, también hay toneladas de libros interesantes para mantenerlo entretenido. Y eso se aplica a los niños, también. Bell incluso proporcionó un cajón lleno de juguetes y artículos para niños curiosos de diferentes edades. Nuestro hijito Liam todavía habla sobre la bicicleta de centavo, y Bell me sorprendió con sus habilidades técnicas con respecto a las bicicletas de todas las descripciones, especialmente las versiones especiales y las variedades no estándar. La reserva se realizó sin problemas con una comunicación rápida y clara. Bell nos recibió en su casa a nuestra llegada y se aseguró de que nos sintiéramos en casa para usar el espacio y todo lo que necesitábamos. A Liam le gustaba alimentar a los pollos y sentarse sobre Bob el caballo. Estoy seguro de que le encantaría ver a los polluelos en la primavera, tal vez la próxima vez que visitemos el área de Tumut. Gracias, Bell, por hacer que nuestra estancia fuera tan memorable. Realmente amamos su espacio y nos sentimos estimulados por su espíritu generoso, así como por su naturaleza laboriosa y creativa. Podemos recomendar su hogar como un lugar para quedarse cuando visite Tumut.”